Cuando la pandemia de Covid-19 hizo estragos en los asilos de Laredo en julio del año pasado, los familiares de personas residentes en estos lugares sufrieron por la falta de información, cuando sus seres queridos resultaron contagiados del virus.
Ahora, un proyecto de ley podría hacer público el número de casos de enfermedades que se encuentran en centros de atención a largo plazo, como un hogar de ancianos. La propuesta obtuvo una audiencia del Comité de Servicios Humanos de la Cámara y nadie se opuso por lo que ahora se dirige al Senado.
El representante estatal Mayes Middleton, republicano por Wallisville, fue el autor de la legislación HB 3306, mientras en el Senado hay dos proyectos de ley similares, el SB 930 presentado por la senadora Judith Zaffirini, demócrata por Laredo, y el SB 882 por Lois Kolkhorst, republicana por Brenham.
El proyecto de ley de Zaffirini fue aprobado por el Senado y enviado a la Cámara el 1 de abril.
“Ha habido innumerables noticias sobre la lucha que atravesaron las familias durante la pandemia, y tratando de averiguar si había ocurrido un brote de Covid en una instalación que albergaba a un miembro de su familia”, dijo Middleton.
La legislación de Middleton haría público el nombre de la instalación, la ubicación y la cantidad de residentes diagnosticados con una enfermedad contagiosa en las instalaciones de asilos y centros de cuidados para adultos.
La información médica personal y los nombres de las personas no se divulgarán según la ley.
La presentación de estos proyectos de ley de transparencia de enfermedades sigue a un período en el 2020, al comienzo de la pandemia, cuando la Comisión de Salud y Servicios Humanos de Texas y los departamentos de salud locales se negaron a divulgar información sobre la cantidad de casos de Covid-19 durante mucho tiempo.
Los miembros del público, incluidos los familiares de los residentes y los periodistas, no pudieron identificar qué instalaciones tenían brotes. Texas tiene más de mil 200 hogares de ancianos y en Laredo operan seis.
La oficina del fiscal general de Texas, Ken Paxton, dictaminó en julio del 2020 que la información sobre enfermedades a nivel de las instalaciones del Estado no estaba protegida por la ley de privacidad de la salud. Después de eso, la Comisión de Servicios Humanos y de Salud de Texas comenzó a publicar conjuntos de datos que mostraban casos de virus y muertes en todas las instalaciones de asilos.
Los centros de atención a largo plazo, en particular los hogares de ancianos, han sido algunas de las comunidades más afectadas por Covid-19. Se han presentado más de 80 mil casos de residentes en hogares de ancianos y casi 9 mil residentes han muerto a causa del virus.