La icónica marca de moda Guess ha anunciado el cierre de 20 de sus tiendas en Norteamérica como parte de una reestructuración estratégica. Este cambio refleja la adaptación de la marca a los nuevos tiempos, donde la pandemia y el auge del comercio electrónico han transformado por completo el panorama comercial.
La decisión de cerrar estos establecimientos responde a la disminución del tráfico en los centros comerciales, un fenómeno que se ha acentuado desde la pandemia de COVID-19, cuando los consumidores optaron por las compras en línea en lugar de las visitas físicas.
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Desde 1981, cuando los hermanos Marciano fundaron la marca, Guess ha sido un referente en la moda, especialmente en el mundo del denim. Durante las décadas de 1980 y 1990, las campañas publicitarias de Guess contribuyeron a posicionarla como una de las marcas más influyentes en la cultura juvenil.
Con más de 1,500 tiendas en todo el mundo, la empresa ha expandido su catálogo más allá de los jeans, incursionando en accesorios como calzado, bolsos y relojes, y realizando adquisiciones estratégicas, como la marca rag & bone.
A pesar de un aumento en los ingresos netos durante el año fiscal 2024, con una cifra de $2.78 mil millones, la compañía enfrentó una caída del 30% en sus ganancias durante el último trimestre, lo que influyó en su decisión de reducir la presencia física en Norteamérica.
Carlos Alberini, CEO de Guess, explicó que los cierres afectarán a tiendas con bajo rendimiento, algunas de las cuales coinciden con el vencimiento de contratos de arrendamiento, mientras que otras requerirán negociaciones para rescindir acuerdos.
A pesar de estos recortes, Guess sigue optimista y mantiene planes de expansión en mercados internacionales, con nuevas tiendas programadas en Tokio y West Hollywood, California.
La compañía proyecta un crecimiento de ingresos para el próximo año, confiando en la fortaleza de su marca principal y sus adquisiciones recientes para seguir impulsando su crecimiento a nivel global.