La madrugada del 16 de diciembre de 2025, un choque múltiple en la autopista Yamuna, en el tramo Agra–Noida a la altura de Mathura, India, dejó un saldo de al menos 13 personas fallecidas y decenas de heridos, según reportes oficiales. El accidente involucró a ocho autobuses de pasajeros y tres vehículos particulares.
Las primeras investigaciones apuntan a que la densa niebla que cubría la zona durante la madrugada fue un factor clave, pues la visibilidad era mínima y, de acuerdo con autoridades policiales, algunos conductores apenas podían distinguir lo que tenían frente a ellos, lo que derivó en una colisión en cadena sin margen para frenar o maniobrar.
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Tras el impacto inicial, varias de las unidades comenzaron a incendiarse, lo que complicó las labores de auxilio, por ello, equipos de emergencia, bomberos y policías acudieron al sitio para controlar el fuego y rescatar a las personas atrapadas entre los vehículos siniestrados mientras las ambulancias trasladaron a los heridos a hospitales del distrito de Mathura.
Con el paso de las horas, las autoridades confirmaron que algunas víctimas murieron calcinadas, al no lograr salir de los autobuses antes de que las llamas se propagaran, y debido al estado en que fueron localizados varios cuerpos, su identificación inmediata no fue posible, por lo que se inició un proceso forense que incluye pruebas de ADN.
La última llamada de un padre a su hija
Entre las víctimas se encontraba Jai Prakash Verma, de 75 años, originario de Rawatpur, en Kanpur Nagar. El hombre viajaba rumbo a Nueva Delhi cuando ocurrió el choque, tras quedar atrapado en el autobús, alcanzó a realizar una última llamada telefónica a su hija, Manisha, para informarle del accidente y pedir ayuda, antes de que la comunicación se interrumpiera.
Al conocer el siniestro a través de redes sociales y reportes preliminares, Manisha se trasladó de inmediato a Mathura. Durante horas recorrió hospitales, revisó listas de heridos y se comunicó con autoridades locales con la esperanza de localizar a su padre con vida, sin embargo, su nombre no apareció entre los sobrevivientes.
Posteriormente, la policía informó a la familia que varios pasajeros habían fallecido atrapados en los autobuses incendiados y que únicamente se habían recuperado restos carbonizados, los cuales fueron enviados a la morgue para su identificación oficial, proceso que continuaba conforme avanzaba el día.