Al menos doce personas murieron y otras 29 resultaron heridas tras un tiroteo ocurrido este domingo en Bondi Beach, en la ciudad de Sídney, una de las playas más concurridas y emblemáticas de Australia. En redes sociales, circula el video del momento exacto en que uno de los atacantes es desarmado por un valiente ciudadano.
Las autoridades de Nueva Gales del Sur calificaron el hecho como un “incidente terrorista”, mientras que el primer ministro Anthony Albanese afirmó que el ataque estuvo dirigido contra la comunidad judía, al haberse perpetrado durante el primer día de la festividad de Janucá.
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Ciudadano desarma a uno de los atacantes
Videos difundidos en redes sociales y medios internacionales muestran el momento en que uno de los atacantes es desarmado por un civil, quien se aproxima y logra neutralizarlo, retirándole el arma con la que había atacado a las personas que se encontraban en la playa.
Testigos señalaron que dos hombres vestidos de negro portaban rifles semiautomáticos. Uno de ellos murió en el lugar, mientras que el segundo fue trasladado a un hospital en estado crítico.
El ataque ocurrió durante un evento por Janucá
El tiroteo se registró durante un evento denominado “Chanukah by the Sea”, organizado con motivo de la celebración judía de Hanuka, lo que refuerza la hipótesis de un acto con motivación antisemita.
En un mensaje televisado, el primer ministro Albanese declaró:
“Este es un ataque dirigido contra los judíos australianos en el primer día de Janucá, un acto de maldad, antisemitismo y terrorismo que ha golpeado el corazón de nuestra nación”.
Hallan explosivos y confirman investigación por terrorismo
La policía informó que en un vehículo vinculado al atacante fallecido fueron localizados artefactos explosivos improvisados, lo que reforzó la clasificación del ataque como terrorista.
Las autoridades continúan con las investigaciones para determinar si existían más implicados o amenazas adicionales.
Condena internacional
El presidente de Israel, Isaac Herzog, condenó el ataque y lo calificó como un “acto cruel contra los judíos”, además de exhortar al gobierno australiano a reforzar las acciones contra el antisemitismo.