El pasado viernes, una casa vacía ubicada en la playa de Rodanthe, Carolina del Norte, fue arrastrada al océano debido al fuerte oleaje generado por el huracán Ernesto.
El impacto de las intensas olas, que se desataron con la fuerza del huracán, hizo que la estructura se hundiera en el mar, marcando el séptimo colapso de una casa en esta área costera en los últimos cuatro años.
Te podría interesar
Large waves from Ernesto demolished the foundation of a North Carolina beach house, causing it to collapse into the ocean on Friday. pic.twitter.com/n0NFRXhIye
— AccuWeather (@accuweather) August 17, 2024
Las autoridades estatales han emitido una advertencia urgente a los residentes locales, recomendando evitar las playas y mantenerse alejados del agua debido a la peligrosa altura del oleaje.
La frecuencia de estos incidentes destaca los riesgos crecientes que enfrentan las viviendas en esta región costera, exacerbados por fenómenos meteorológicos extremos.
La situación subraya la necesidad de medidas preventivas y la importancia de estar alerta durante eventos meteorológicos severos, especialmente en áreas vulnerables a la erosión costera y las tormentas.