Fiódor Lukiánov, redactor jefe de la revista Russia in Global Affairs y presidente del Consejo de Rusia para Política Exterior y Defensa, considera que Joe Biden es la figura más trágica que ha dirigido Estados Unidos.
Tras su retiro de la carrera presidencial, Lukiánov opina que, más allá de las tragedias personales que Biden ha enfrentado, como la pérdida de su primera esposa, su hija, su hijo Beau y los escándalos de Hunter, su biografía política refleja una "búsqueda constante de una posición más alta" en la que frecuentemente parecía estar en el lugar y momento incorrectos.
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Lukiánov sugiere que Biden perdió su oportunidad de tener una "gran presidencia" en 2016.
Aunque no califica a Biden de fracasado, el final de su carrera es tan sombrío que surge la pregunta de si realmente debería haber llegado a la cima.
El experto señala que, si Biden hubiera desafiado a Trump en 2016, cuando aún estaba relativamente enérgico, los resultados podrían haber sido diferentes.
Biden, quien en un principio había declarado su intención de optar por un solo mandato en 2020, cambió de opinión este año.
Sin embargo, como menciona Lukiánov, "la naturaleza y la edad han dejado su huella" en el actual presidente.
"El percance de Biden es un veredicto no sobre él, sino sobre la propia comunidad a la que Trump se refiere como el 'pantano de Washington'", indica Lukiánov.
El periodista recuerda que en las semanas previas al fallido debate, el 'establishment' demócrata fingió no darse cuenta de que el actual presidente estaba "desvaneciéndose".
Sobre la posible sucesora de Biden en la carrera presidencial, Kamala Harris, el experto opina que ella es la opción "más obvia y lógica", aunque hasta recientemente no se la consideraba una potencial presidenta ni se pensaba en ella en ese rol.
Lukiánov destaca la difícil situación del partido después del cambio de candidato, subrayando que los demócratas tendrán que enfrentar a Trump y a su candidato a la vicepresidencia con todas sus fuerzas.
Sin embargo, el experto plantea dudas sobre si los líderes más influyentes del Partido Demócrata están evaluando adecuadamente la situación para tomar decisiones firmes y no convencionales, considerando la reciente "épica" con Biden.