Nunca imaginamos lo que un microorganismo nos podría causar; pasamos de la incredulidad a la sorpresa, después a la preocupación, para terminar envueltos en un miedo de muerte.
Así es, el virus SARSCoV-2, causante del covid-19, nos mostró lo frágil que somos y que en un abrir y cerrar de ojos nuestra vida se puede extinguir. Todo comenzó con aquella simple noticia de que en una ciudad llamada Wuhan, ubicada en el centro de China, comenzaron a presentarse casos de una neumonía atípica y de origen desconocido.
Fue en diciembre del 2019.
Ni los medios de comunicación ni el gobierno y menos la ciudadanía tomaron muy en cuenta esa situación. Se pensó que era un virus de aquel país y que no pasaría a mayores, pero sorpresa, esa enfermedad se convirtió en una de las pandemias más letales que han sacudido al mundo.
Dejó más de 6 millones 800 mil defunciones, además se contagiaron más de 600 millones de personas en el planeta. En México, la cifra de contagiados fue de 7 millones 633 mil y se reportaron 334 mil 336 decesos.
Dentro de las noticias de gran impacto que El Mañana ha publicado en sus 100 años de trayectoria, sin duda ésta es una de ellas. Incluso durante la pandemia los trabajadores de este periódico tuvieron que laborar desde sus hogares durante al menos ocho meses, para evitar un contagio colectivo.
Para numerosas personas fueron dos años de inactividad y encierro, para otros fue motivo de reflexión, pero para otros más fueron dos años muy tristes, ya que el virus les arrebató a seres queridos.
ASÍ SURGIÓ
El posible paciente cero fue un vendedor de pescado, quien se reportó como enfermo el 11 de diciembre del 2019 en Wuhan. El gobierno chino detectó y confirmó una “extraña enfermedad”.
Un nuevo coronavirus empezaría a recorrer el mundo. Entre el 11 y 12 de enero del naciente 2020 se presentaron las primeras defunciones por esta enfermedad hasta entonces desconocida, que un mes más tarde la Organización Mundial de la Salud (OMS) le puso nombre oficial (covid-19), y el 27 de febrero apareció el primer caso en México. Fue un jueves.
Ese día nadie reparó en el 137° natalicio de José Vasconcelos, la noticia que acaparó la conversación pública fue la confirmación del primer caso de covid-19 (coronavirus disease -enfermedad por cononavirus- surgida en 2019 ) en México.
Desde la conferencia presidencial mañanera, las autoridades sanitarias anunciaron que habían detectado el virus en un hombre de 35 años en la Ciudad de México, con antecedente de viaje a Italia.
Allí, también se anunció un segundo caso detectado en Sinaloa, con pronóstico reservado. “Una persona de 41 años de edad, y se está en espera de los resultados de la toma de muestra enviada al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE)”, se dijo.
El primer caso de covid-19 en el país apareció 74 días después del primer caso diagnosticado en el mundo. Aunque la Organización Mundial de Salud (OMS) señaló que el posible paciente cero era un contador de 41 años que supuestamente enfermó el 8 de diciembre del 2019, una cronología publicada en la revista Science por el doctor Michael Worobey, director de Ecología y Biología Evolutiva de la Universidad de Arizona, aseguraba que fue un vendedor de pescado que se infectó el 11 de diciembre del 2019 en el mercado de Wuhan. Aunque el origen no se ha podido precisar hasta nuestros días, lo que sí sabemos es que el número de casos aumentó rápidamente, siguiendo una tendencia de crecimiento exponencial e inimaginable.
13 DE MARZO, PRIMER CASO EN NUEVO LAREDO
Luego de semanas de especulación y de que en Laredo, Texas ya sumaban 34 casos, autoridades dieron a conocer el primer enfermo de covid-19 en Nuevo Laredo.
La Secretaría de Salud de Tamaulipas, en su sitio web, reveló sin mucho detalle en el mapa de infecciones por coronavirus, que en Nuevo Laredo había un paciente confirmado.
Las cifras finales registradas en la página de Salud señalan que hubo en Tamaulipas, 187 mil 320 contagiados, de los que 8 mil 362 fallecieron. En Nuevo Laredo se contagiaron 13 mil 347 y reportaron la muerte de mil 99.