TEMPORADA DE HURACANES 2024

¿Qué tan destructivo sería un huracán de categoría 6?

La propuesta no es nueva y nace de la observación de que el cambio climático está intensificando la potencia de los huracanes, tifones y ciclones

Buscan cambiar la escala para medir la potencia de los huracanes
Buscan cambiar la escala para medir la potencia de los huracanesCréditos: Internet
Escrito en GLOBAL el

Florida ya sintió los primeros embates de llegada del huracán Milton, una tormenta descrita como una de las más devastadoras y colosales de la historia reciente.

En este contexto, surgen nuevamente interrogantes sobre las herramientas disponibles para medir la magnitud y los riesgos que plantean estos fenómenos climáticos. Las temperaturas globales en aumento y los océanos acumulando más energía para alimentar tormentas intensas exigen nuevas formas de análisis.

Huracán categoría 6

En febrero, un estudio sugirió actualizar la escala Saffir-Simpson, que mide la intensidad de los huracanes, para incluir tormentas aún más poderosas.

Esta escala, vigente desde la década de 1970, actualmente clasifica los huracanes en cinco categorías, de acuerdo con la velocidad del viento. Sin embargo, los científicos proponen la adición de una sexta categoría, dado el creciente poder destructivo de las tormentas.

Según el estudio publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, un huracán de categoría 5, con vientos sostenidos de al menos 252 km/h, podría alcanzar velocidades de hasta 308 km/h.

Aquellos huracanes que superen ese umbral serían considerados de categoría 6. Esta propuesta nace de la observación de que el cambio climático está intensificando la potencia de los huracanes tropicales, también conocidos como tifones o ciclones en otras partes del mundo.

Cada vez son más intensos

Entre 1980 y 2021, hubo 197 ciclones de categoría 5 en todo el mundo, y cinco de ellos habrían calificado como categoría 6 si esta escala ya existiera. Estos eventos ocurrieron después de 2013, incluyendo el huracán Patricia en 2015 y el súper tifón Haiyan en 2013.

A pesar de que la idea de agregar una nueva categoría no es reciente, se ha retomado con mayor urgencia debido a los riesgos cada vez más mortales que enfrentan las regiones costeras.

Además, la escala actual no tiene en cuenta el impacto de las marejadas ciclónicas ni las lluvias torrenciales, factores que pueden ser igual o más devastadores que los propios vientos, especialmente en un planeta que sigue calentándose.