Con más de 200 misiles balísticos, Irán atacó a Israel esta mañana, pese a las advertencias que había hecho un funcionario estadounidense sobre las consecuencias de un alza en los intercambios violentos.
El ataque contra Israel es presuntamente una respuesta a las muertes de Ismail Haniyeh, exlíder de Hamás, y de Hasán Nasralá, exlíder de Hezbolá, de acuerdo con la agencia de noticias iraní Fars, citada por 'Al Jazeera'.
Fueron 240 misiles balísticos lanzados contra las ciudades de Tel Aviv y Jerusalén, ataque anunciado desde la noche del lunes 30 de septiembre enviada a teléfonos móviles y anunciada en la televisión nacional.
El portavoz del Ejército israelí, el contralmirante Daniel Hagari, afirmó que el sistema de defensa aérea del país estaba plenamente operativo y detectaba e interceptaba amenazas. "Sin embargo, la defensa no es hermética", afirmó.
Ante la inminente agresión militar, un funcionario estadounidense dijo el martes por la mañana que un ataque iraní a gran escala tendrá "graves consecuencias" para Irán, sin especificarse las sanciones.
Tras los ataques con más de 200 misiles balísticos, Jordania ha suspendido todo el tráfico aéreo sobre el país. Al mismo tiempo, a través de un anuncio por radio, Israel también ha anunciado que se han cancelado todos los despegues y aterrizajes en el principal aeropuerto del país, Ben-Gurion.