Dentro de una aeronave, como en cada medio de transporte, cada centímetro cuenta, esto entre otros factores están provocando que los asientos reclinables en algunos lugares de los aviones están desapareciendo.
Algo que no se ha logrado corregir del todo y que afecta a cualquier pasajero en un avión, son los asientos reclinables, que suelen invadir los espacios de las personas que van sentadas en el asiento de atrás, con una consiguiente molestia.
Este no es un hecho cualquiera, ya que todo esto ha movilizado a una microindustria que intentan la manera de resolver el tema de la comodidad de los asientos para un avión.
Prereclinables: ¿Es el futuro de los asientos en los aviones?
Hubo un tiempo en que todos los asientos de clase turista de las aerolíneas llevaban incorporado el botón de reclinación. Hoy en día, hay modelos de asientos que ya no cuentan con esa opción.
Esta situación, ¿es un retroceso?, aquí los pros y los contras
Los pros de esta inovación
- Paras las aerolíneas, el mecanismo que activa la reclinación del asiento, además de que va incluido en coste inicial, también requiere de un presupuesto para su mantenimiento.
- Aunque no lo parezca, este aditamento representa un peso extra dentro de la aeronave, que todavía es más significativo en las alturas. En la actualidad, los asientos de avión más modernos son más ligeros, ya pesan entre 7 y 10 kilos cada pieza.
- Cualquier peso extra que pueda evitarse dentro de un avión, significa un ahorro en el consumo de combustible, ya que la aeronave, requerirá de menor potencia para volar.
- Otro aspecto que los expertos señalan que en cierto modo es muy importante, es el costo del tiempo por interrupción, ya que los pasajeros pueden discutir por la reclinación de los asientos. Esto implica que los auxiliares de vuelo tiengan que intervenir, ya que incluso, en algunos casos, los viajeros no están dispuestos a ceder e incluso se han tenido que desviar vuelos por motivos de seguridad.
La nueva generación de asientos
A partir del año 2000, aparecieron asientos superligeros de alta ingeniería, que además de disminuir en peso, ya no tenían función de reclinado.
Para “maquillar” la ausencia del botón de reclinado, a este tipo de asientos se les denominó "prerreclinados". Las nuevas características de los asientos es que los respaldos se encuentran en un ángulo intermedio, entre una posición totalmente erguida y una ligeramente reclinada.
Estas innovaciones en un principio solo fueron adoptadas por las aerolíneas de bajo costo, que tiene como principal característica operar vuelos de pocas horas, ahorrar al máximo dentro de las aeronaves para hacer lo mayormente redituable sus operaciones.
En los últimos años, los fabricantes de asientos han encontrado formas de hacer más espacio para las rodillas; sencillo, han adelgazado los respaldos del asiento, desplazando la estructura para que no estorbe a las rodillas y mejorando el espacio para las espinillas.
¿Qué tienen de positivo los asientos que no se reclinan?
Son positivos cuando son parte de un vuelo a corta distancia, de poca duración, de un tiempo aproximado a las dos horas; además de que evitan posibles peleas entre la persona que viaja adelante y la que va detrás.
La situación es totalmente diferente en los vuelos de larga distancia. En este caso se recomienda ser cortés en el avión y percatarse antes de reclinar el asiento, accionar el dispositivo de una manera lenta y suave. Por supuesto, poner el respaldo en posición vertical, en el momento en que se han servido alimentos o refrigerios.