Donald Trump, exmandatario de los Estados Unidos, se declaró no culpable de los cargos de conspiración para permanecer en el cargo a pesar de su derrota electoral en noviembre de 2020.
El republicano, quien aspira a regresar a la Oficina Oval, volvió a Washington esta vez para ser fichado, registrar sus huellas digitales y lo procesaran por los cargos en su contra presentados el martes pasado por Jack Smith, fiscal especial.
Te podría interesar
La jueza magistrada Moxila Upadhyaya, supervisora de la audiencia, que duró una media hora, le ordenó a Trump que no hable con el caso con ningún testigo, sólo por medio de sus abogados o en presencia de los mismos.
Los abogados de Trump fijaron la fecha de la primera audiencia ante la jueza de este juicio, Tanya Chutkan, el 28 de agosto, la última de las fechas que ella proporcionó como posibles.
Lo anterior porque el equipo defensor de Trump quiere alargar el proceso lo más posible, pues su estrategia es que si Trump gana las elecciones de 2024 los cargos federales en su contra se cancelen.
Tras la audiencia, Trump hizo unas breves declaraciones en el aeropuerto nacional Reagan, antes de subirse a su avión privado para regresar a Bedminster, Nueva Jersey.
Este es un día muy triste para los Estados Unidos. Esto nunca debió suceder en Estados Unidos
Esta es la tercera vez en cuatro meses que Trump se presenta ante un juez por cargos penales y ya está acusado en otros dos casos.
Trump ya está bajo acusación en otros dos casos.
A Trump se le acusa de 40 cargos en el caso de los documentos confidenciales y 34 cargos de delitos graves en relación con un pago secreto a una actriz porno previo a la elecciones de 2016.
Este mismo mes el magnate podría enfrentar un cuarto caso penal, el que los expertos consideran el más trascendental de todos, pues el fiscal de distrito del condado de Fulton, Georgia investiga si Trump intentó echar por tierra los resultados de las elecciones del 2020.