Aunque la mayoría de las madres darían la vida por cualquiera de sus hijos, incluso el por el más ingrato, hay otras que actúan de forma totalmente distinta, como el caso que trataremos a continuación, pero no solamente debemos enfocarnos en la mujer, sino preguntar ¿dónde está el padre?
Este miércoles, al norte de Quito, capital de Ecuador, un grupo de ciudadanos se percató de que una bebé había sido abandonada en un contenedor de basura ubicado en un barrio de clase media alta, Rumipamba, en el cruce de las calles Ignacio San María y La República.
Consternados por el hecho, marcaron al número de emergencias 911 para informar a las autoridades de auxilio; al parecer, la pequeña, quien todavía contaba con el cordón umbilical, tendría unas 39 semanas de gestación.
Al lugar del hallazgo acudieron con la premura del caso personal especializado de la Cruz Roja Ecuatoriana y agentes de la Policía Nacional, en ambulancia y patrullas, respectivamente.
Luego de hacerle una evaluación inicial a la pequeña abandonada como si fuera un animal, paramédicos determinaron que presentaba cianosis (piel azulada por falta de oxígeno), por lo que se le dieron los primeros auxilios y se la trasladó a un hospital local.
Únicamente este año, hasta el 13 de junio, las autoridades ecuatorianas han registrado 110 niños y adolescentes abandonados, lo que equivale a un promedio de uno cada 35 horas 30 minutos, una situación alarmante.