En una clara muestra de violencia y desentendimiento social, un limpiaparabrisas mató a un taxista, solo porque no lo dejó limpiar su coche y lo dejó con la mano estirada.
Los hechos se presentaron en Lima, Perú, donde Gian Marco Caro Núñez murió a manos de un trabajador de la calle en el cruce de las avenidas Abancay y Grau. De acuerdo con los primeros informes, el taxista se detuvo en una señal roja aproximadamente a las 12:00 horas del 5 de abril cuando fue interceptado por el limpiaparabrisas.
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A pesar de la negativa reiterada del conductor para evitar que este limpiara su coche, el hombre continuó con su labor, derivando en una discusión que alejó al sujeto. La víctima, pensando en haber ganado el debato, nunca esperó que su agresor volvería con unas tijeras, las cuales clavó en su cuerpo, justamente en el pecho, a la altura de su corazón.
El lesionado fue trasladado al Hospital Emergencia de Grau, pero murió debido a la gravedad de la herida. Mientras tanto, según testigos del crimen, el limpiaparabrisas abandonó el lugar con total tranquilidad, quedando grabado el hecho por cámaras de seguridad de la municipalidad de Lima.
Atraparon al agresor
Por lo anterior, la Policía Nacional del Perú (PNP) comenzó la operación de búsqueda para encontrar al asesino, José Alberto Jirón Holder, de nacionalidad venezolana, el cual fue encontrado conversando con sus amigos de una forma tranquila en la “carpa Grau”. Al ser detenido, el criminal argumentó haberse calentado los ánimos por el insulto del propio taxista.
“El pana se bajó del auto y comenzó a insultarme y darme golpes, y yo le di con una piquetera (tijeras)”, explicó el venezolano ante las autoridades.
Cuando se le preguntó si lo volvería a hacer, José Alberto indicó que solo se estaba defendiendo y nunca pensó que moriría el conductor por su agresión.