Un ataque de celos entre dos adolescentes tuvo un final fatal. Los hechos ocurrieron en la localidad de Clessé, al este de Francia, lugar en donde un adolescente de solo 14 años decidió terminar con la vida de una chica con quién mantuvo un romance adolescente, semanas atrás. 

El delito fue descubierto cuando una mujer que tiene su domicilio cerca del edificio gubernamental del Ayuntamiento de Clessé, encontró una terrible escena, pues la menor yacía en el suelo con un arma blanca clavada en su cuello. Preocupada y con la intención de salvar la vida de la jovencita, la mujer llamó a los servicios de emergencia. 

La menor pierde la vida

Tras unos minutos de espera los elementos de emergencias médicas arribaron al lugar, lamentablemente la menor ya no contaba con signos vitales, por lo que se confirmó la muerte. Tras los hechos los servicios de investigación policiaca, comenzaron la búsqueda del autor del asesinato. 

Al hablar con los familiares de la fallecida, fue mencionado un menor de edad, un jovencito de 14 años que recientemente había mantenido un romance adolescente con la chica. El hecho levantaba sospechas debido a que era una relación disfuncional con múltiples vaivenes. 

Ante la sospecha, las autoridades acudieron a interrogar al menor, quien levantó las sospechas al presentarse a su escuela con diversas heridas, y signos de violencia como arañazos y algunos moretones en las manos, mismos que tras el interrogatorio se confirmó fueron generados cuando la joven intentaba defenderse de las agresiones del joven. 

Al realizar el interrogatorio, el menor aceptó su culpabilidad ante los policías, declarando que tras una pelea que se salió de control, comenzaron a golpearse, y al calor del momento el joven tomó la decisión de utilizar el cuchillo que llevaba en el bolso para quitarle la vida a su exnovia. 

Cargos

Los hechos han conmocionado al país europeo, debido a la corta edad de los protagonistas, según informó el Fiscal General de Mâcon, Éric Jallet, la menor presentaba también golpes y cuchilladas en el torso, los hombros, la cara y el cuello.

Ante la violencia del crimen pasional, el  responsable de la muerte pasará un mínimo de 20 años tras las rejas por los cargos de homicidio premeditado. 

Un hecho similar ocurrido en 2021 también alertó a la opinión pública francesa, cuando fueron imputados un chico y una chica, ambos de 15 años, por matar arrojando al río Sena a su compañera de clase, de 14, supuestamente por una historia de celos.