Ayer, el presidente de Ucrania Volodímir Zelenski anunció mediante Telegram de un terrible acto bélico por parte de Rusia, augurando múltiples víctimas. Ahora, van 18 muertos en el ataque con misiles rusos a un centro comercial de Ucrania, buscándose aun sobrevivientes en el lugar.
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Autoridades reportaron a 36 personas desaparecidas, las cuales presuntamente siguen entre los escombros del inmueble. Familiares de las personas aún sin encontrar se congregaron en un hotel al otro lado de la calle de los restos del centro comercial de la localidad ucraniana de Kremenchuk.
Bomberos y personal de emergencia se encuentran en actividades de rescate y remoción de escombros, con aspecto cansado luego de trabajar múltiples horas para poder hallar con vida a quienes faltan.
Un elemento de los "tragafuegos", Oleksandr, afirmó como su equipo trabajó durante toda la noche, esperanzados en encontrar a algún sobreviviente.
"Sacamos cinco cuerpos. No encontramos a nadie con vida", dijo Oleksandr.
Llamándolo "uno de los atentados terroristas más graves en la historia europea", el presidente ucraniano Volodímir Slenskim acusó a Rusia de perpetrar dicho ataque balístico en un lugar de nulo interés militar, con cientos de personas, quienes esperaban llevar "una vida normal" a pesar del conflicto armado.
A su vez, el Ministerio de Defensa Ruso afirmó como lanzó misiles contra un depósito de armas occidentales, donde una explosión de municiones provocó el incendio en el centro comercial cercano, el cual se encontraba vació según su inteligencia.
El hecho ya es conocido por los líderes del Grupo de los Siete (G7) países más ricos, quienes en una cumbre en Alemania describieron el ataque como "abominable".
"El presidente ruso (Vladimir) Putin y los responsables rendirán cuentas", dijeron en un comunicado conjunto.
Hasta el momento son 18 muertos en el ataque con misiles rusos al centro comercial de Ucrania, donde se siguen buscando sobrevivientes.
Jesús García