Estos últimos días la monarca de Inglaterra ha suspendido varias actividades por sus problemas de salud. Ahora, este viernes la reina Isabel II reapareció en un concurso ecuestre, notablemente feliz.
La competición en Windsor mostró a la reina en diferentes puntos, buscando así acabar con los rumores sobre su estado, pocos días después de haber sido suplantada por su hijo Carlos en una importante cita parlamentaria.
Con gafas ahumadas y una chaqueta de punto azul oscuro, apareció sentada en el asiento delantero de un Range Rover. Desde su ventanilla la monarca intercambió algunas palabras con los asistentes, mostrándose visiblemente feliz y riendo con un grupo de personas.
Varios caballos, propiedad de la reina, participan en esta competencia ecuestre, pasión demostrada más de una vez por parte de la reina.
Isabel II renunció el martes a pronunciar el tradicional discurso del trono el cual marca cada año el inicio de una nueva sesión parlamentaria siguiendo el consejo de su médico, quien le indicó reposo debido a sus problemas de movilidad.
Se trata de la tercera vez que falta a una importante cita constitucional en sus 70 años al poder del reinado de Inglaterra. La salud de la monarca ya preocupaba a muchos desde octubre del año pasado, cuando pasó una noche hospitalizada para someterse a "pruebas", de las cuales jamás se supo para qué eran hechas.
Además, en febrero se confirmó su contagio con la covid-19, comentando como la enfermedad la había dejado "muy cansada".
La reina Isabel reapareció en un concurso ecuestre para disipar cualquier rumor sobre su condición médica, augurando todavía más años en el reinado.
Jesús García