Dicen que las promesas se cumplen y así fue en un emotivo y muy particular caso, pues en la Segunda Guerra Mundial unos soldados se comieron el pastel de cumpleaños de una niña y 77 años después lo repusieron.
Se trata de Meri Mion, quien recibió entre lágrimas un pastel por parte del ejército de los Estados Unidos durante una ceremonia en Vicenza, al noroeste de Venecia, Italia este jueves.
Mion cumplirá 90 años el viernes, conmemorando a la par del día en el que soldados de la 88 División de Infantería de Estados Unidos ingresaron a la ciudad, el 28 de abril de 1945. En ese tiempo, la pequeña de 13 años en ese entonces, pasó la noche en el ático de su granja de un pueblo cercano.
A la mañana siguiente la madre de Meri le horneó un pastel para festejar su cumpleaños; sin embargo, el bizcocho desapareció de la ventana donde lo había puesto para dejarlo enfriar. Según el Ejército de los Estados Unidos, unos soldados lo devoraron, hambrientos de las batallas disputadas.
Los italianos agasajaron a las tropas con vino y pan, agradecidos después de su entrada a Vicenza por su calle principal tras el retiro de las tropas alemanas. Del pastel no se supo nada hasta este 2022, cuando Meri Mion recibió por parte del ejército americano un gran bizcocho adornado con betún, fresas y una canasta de chocolate con huevos de dulce.
Comandantes estadounidenses y funcionarios italianos le cantaron “Feliz cumpleaños” en italiano y en inglés, mientras ella agradeció el inesperado gesto.
“Mañana comeremos ese postre con toda mi familia, recordando este maravilloso día que nunca olvidaré”, afirmó Mion, citada por el Ejército de Estados Unidos.
A pesar de que soldados se comieron el pastel de cumpleaños de una niña, 77 años después se lo repusieron, respetando un alimento tan sagrado en un aniversario de cualquier persona.
Jesús García