El conflicto armado europeo ha dejado serias consecuencias para Ucrania, quien ya no puede más sostener esta situación. En este marco, Rusia anunció la rendición de solados ucranianos en Mariúpol, lugar estratégico para tomar directamente a la nación.
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Según el Ministerio de Defensa de Rusia, más de mil soldados de Ucrania se rindieron en la ciudad, después de llevar semanas sitiada por el ejército.
"En la ciudad de Mariúpol, en la zona de la fábrica metalúrgica Ilich (...) mil 26 militares ucranianos de las 36ª brigada marina depusieron de manera voluntaria las armas y se rindieron", aseguró el ministerio en un comunicado.
Reportaron haber encontrado 150 militares heridos en el lugar del conflicto, la gigantesca zona industrial de la ciudad. A su vez, fueron trasladados al hospital de Mariúpol para su debida atención médica.
El lunes, Reino Unido acusó a Moscú de haber utilizado agentes químicos en esta zona para obligar a los residentes su rendición y deponer sus armas. Liz Truss, secretaria extranjera de Reino Unido, aseguró contar con elementos válidos donde sostener esta afirmación; dijo tener en investigación las pruebas comentadas para poder acusar debidamente a la nación rusa de crímenes de guerra.
"Informes de que las fuerzas rusas pueden haber utilizado agentes químicos en un ataque contra la población de Mariupol. Estamos trabajando urgentemente con socios para verificar los detalles. Cualquier uso de tales armas sería una escalada insensible en este conflicto y haremos que Putin y su régimen rindan cuentas." comunicó Liz Truss en su cuenta de Twitter.
Igualmente el Alcalde de Mariúpol, Vadym Boychenko, indicó tener reportes de más de 10 mil civiles muertos hasta el momento por el asedio del ejército extranjero en su región, pudiendo aumentar hasta 20 mil debido a los ataques y privaciones a lo largo de semanas, las cuales han dejado "calles cubiertas de cadáveres".
Ucrania no puede más y el reporte de Rusia, quien anunció la rendición de soldados en Mariúpol, demuestra la crudeza de una guerra.
Jesús García