Hay historias de personas extraviadas que, afortunadamente, vuelven a dar con sus familiares después de años sin saberse de su paradero. Estoy mismo ocurrió en Texas, Estados Unidos, donde una mujer, secuestrada por su niñera, se reencontró con su familia 51 años después.
Melissa Highsmith fue raptada por su cuidadora en 1971 mientras su madre, Alta Apatenco, se encontraba trabajando. Con el pretexto de salir a dar un paseo, la mujer desapareció con ella sin dejar rastro.
El caso de la desaparición de la pequeña Highsmith conmovió a toda Texas durante la década de los 70, dejando abierta la investigación, pues las pistas halladas por el Departamento de Policía del condado de Forth Worth no pudieron ubicarla.
Ahora, nuevamente una prueba de ADN pudo hacer realidad el milagro, indicando qué había pasado con Melissa, quien ahora ya es una mujer adulta.
Bebé raptada.
Este noviembre la situación logró dar luz, luego de que una empresa dedicada a la genética y las redes sociales participaran para dar con el paradero de Melissa Highsmith.
El reencuentro ocurrió gracias a la plataforma 23AndMe, el cual conectó a los hijos de Melissa con sus familiares biológicos a través de las redes sociales, específicamente por Facebook, donde Highsmith pudo hablar con sus padres biológicos.
Nuestro hallazgo de Melissa se debió únicamente al ADN. No por la participación de la policía o el FBI, la participación de podcasts o incluso las propias investigaciones o especulaciones privadas de nuestra familia.
Luego de la revelación Melina, como se había llamado durante todo este tiempo, se dijo acongojada por la situación, confrontando a quien había considerado como madre durante más de medio siglo. De hecho, su relación con ella nunca fue genuina; llena de problemas, se fue de la casa a los 15 años, confrontando así el duro mundo básicamente sola.
Sin embargo, ahora desborda alegría y plenitud por saber de donde realmente provenía ella. Aun se encuentra asimilando que tiene dos padres, hermanos que jamás dejaron de buscarla y varios nietos que quieren conocer a su tía perdida.
La familia no sabe si la mujer que la crio fue la secuestradora o cómo llegó a ser su tutora. La policía de Fort Worth dijo que, aunque el plazo de prescripción de los cargos penales ha expirado hace tiempo, seguirán investigando.
A casi un mes del reencuentro, ahora la familia Hghsmith se dedica a tratar de recuperar el tiempo perdido, elaborando nuevos recuerdos para reemplazar los perdidos.