Una influencer colombiana, reconocida en su país por participar en un programa televisivo llamado "Gerreros Colombia", ha reportado ante sus redes sociales un “abuso” de parte de una agencia automovilística.
Resulta que Luisa semanas atrás había llevado su camioneta a una revisión en la agencia automovilística, sin embargo bajo la explicación de que requería unas piezas que no tenían en existencia, le avisaron que la reparación se llevaría mas tiempo de lo esperado.
Pasadas las semanas esta chica se encontraba realizando una sesión fotográfica por motivos de trabajo en un centro comercial, para llevarse una gran sorpresa tras encontrar su camioneta estacionada, enterándose así de que su camioneta ya no estaba descompuesta, sino que alguien la estaba utilizando como vehículo personal.
Cortina llevaba en su bolso una de las llaves de la camioneta, con lo que confirmo que se trataba de su vehículo, por lo que decidió revisarla para ver que sorpresas encontraba en el interior, y aparentemente el vehículo no fue utilizado solamente para uso en la ciudad, sino que alguien se fue de vacaciones en la camioneta, pues en la cajuela de esta se encontraban unas maletas de viaje
“Se supone que mi camioneta estaba en el taller hace un mes y vea dónde me lo encuentro, y aparte estaban de viaje, ¿no?, porque tienen el baúl lleno de maletas ¡Esto es un robo! ¡Me robaron el carro y lo encontré en Fontanar! Y lo peor de todo es que no fue con un taller cualquiera, sino con el concesionario DS Colombia”, declaró enojada para sus historias de Instagram.
La chica señalo la preocupación que esto significaba para ella pues, la persona que tomo su camioneta pudo haber cometido un crimen en su interior o provocado un accidente y al ser la camioneta de su propiedad, podría incriminarla.
La enojada chica comunico que este echo generaría una denuncia para la concesionaria de autos DS Colombia por robo y abuzo de confianza además de hacerlos responsables en caso de que se tomara su camioneta con algún fin ilícito.
“Luego de darme cuenta de todo llamé a la Policía y me comuniqué con el concesionario para ver qué estaba pasando, y ellos enviaron un representante legal que, debo confesar, me dio la razón en todo momento porque pues igual yo la tenía”.
Su historia se ha vuelto tema de conversación en las distintas plataformas y redes sociales causando indignación entre los espectadores.