A pesar de los datos arrogados en estudios del contagio por covid-19, aún hay personas sin escrúpulos, quienes desestiman las evidencias científicas y buscan lucrar con la situación actual. Este fue el caso del chamán Eliyantha White, famoso en Sri Lanka, quien aseguraba tener "agua bendita" para curar la enfermedad y, sin embargo, murió por las complicaciones del virus.
Este personaje confirmó desde noviembre del año pasado, tener en su poder la fórmula para hacer "agua bendita", capaz de curar la covid-19 de cualquier persona. Fue tanta su seguridad en esto, afirmando incluso verter ollas con el líquido especial en los ríos de la India para acabar con la pandemia en su país.
Sin dudarlo, Eliyantha se negó a ser vacunado contra el coronavirus, poniendo en riesgo su vida durante mucho tiempo por esta decisión.
A principios del mes el hombre, de 48 años, se contagió con el virus. Fue trasladado a un hospital privado donde su estado empeoró y falleció por su cuerpo delicado.
Eliyantha White era considerado un excelente chamán, popular entre los famosos, a quienes llegó a tratar al igual que algunos políticos de la región.
Ganó fama internacional debido a tratar con la poción a jugadores de cricket indios, entre las que destacó Sachin Tendulkar, quien agradeció públicamente su tratamiento, acrecentando su popularidad.
Su influencia era tal que, incluso la ministra de Salud de la India, Pavithra Wanniarachchi, respaldó la idea de tratar a las personas con el agua bendita promocionada por White. Lamentablemente la funcionaria enfermó por la covid-19, internándose en un hospital privado para tratar sus síntomas.
De acuerdo con la agencia AFP, al funeral de Eliyantha White acudieron célebres personas de la India, entre otros famosos y múltiples funcionarios políticos.
El primer ministro Mahinda Rajapaksa recitó unas palabras para el fallecido:
"Su legado seguirá viviendo a través de todas las vidas, tocó y sanó de varias dolencias" comentó Mahinda Rajapaksa.
En efecto, el agua bendita que curaba la covid-19 jamás existió, suponiendo su poder curativo a tan solo una creencia popular y la sugestión de las personas, provocado por el mismo chamán.
Jesús García