CIUDAD DE MÉXICO.- Todos los días nos encontramos con historias de verdaderos guerreros que luchan por sobrevivir. Todos muestran una gran valentía ante la adversidad, como es la historia de Waylen, un niño de 3 años que llegó bailando al quirófano para su trasplante de corazón.
Esta historia se desarrolló en el hospital de niños Joe DiMaggio, en Florida, en donde el pequeño Waylen consiguió un donante, por lo que fue programado para su trasplante. Lo que normalmente hubiera ocurrido sería ver al niño siendo trasladado en una camilla, pero no, el pequeño va caminando por los pasillos del hospital con un tanque de oxígeno, mientras baila ‘Watermelon Sugar’ de Harry Styles.
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Fue el mismo hospital quien compartió esta extraordinaria historia, llena de fe, alegría y amor por la vida.
Waylen padece miocardiopatía restrictiva. Por 8 largos meses estuvo esperando el milagro de encontrar un donante de corazón. Su enfermedad era tan grave, que en cualquier momento de ese periodo pudo haber perdido la vida, sin embargo se aferró a la vida y en el momento más importante de su corta vida, demostró más alegría y sabor que nunca.
Llegamos a conocer a estas familias tan íntimamente. Lleva aquí ocho meses», dijo la cardióloga pediátrica del niño, Laura D’Addese.
Los familiares no pudieron contener la emoción por permitir que el pequeño Waylen tenga una nueva oportunidad de vida.
Las personas que han visto el video lo han compartido y se ha vuelto viral alrededor del mundo.
Así, una historia más de verdadera lucha, que nos enseña que no basta la adversidad, cuando hay esperanza. Waylen, de solo 3 años, cuando por fin encontró un donador de corazón caminó rumbo al quirófano, pero lo hizo de una manera que conmovió el corazón de todos. Iba lleno de alegría y bailando Watermelon Sugar.