Una mujer bajó 80 libras, alrededor de 36 kilos y asegura que el secreto es eliminar las redes sociales de su vida. Brenda Finn, de 33 años, de Woodside Park, al norte de Londres, llegó a pesar más de 99 kilos en agosto del 2020.
La también vendedora de velas independiente, contó que “siempre había sido un poco gordita”, pero se vio a sí misma hincharse a una talla 22 entre 2016 y 2019 gracias a los malos hábitos alimenticios.
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Después de pesar casi 100 kilos, sabía que tenía que deshacerse de un exceso de peso y prometió hacer cambios en su vida; había culpado a las redes sociales por su falta de progreso en el intento de perder peso, gracias a las publicaciones y anuncios constantes sobre insalubres. comida, lo que la convertía en un refrigerio y la distraía de la actividad.
Brenda eliminó Facebook, Instagram y Twitter, y su peso comenzó a bajar drásticamente. Ahora pesa 58 kg y ha perdido más de un tercio de su peso corporal.
"Cuando me di cuenta de lo distraídos que eran Facebook e Instagram de mi progreso, me desconecté de todo. Ese fue un punto culminante para mí, fue difícil despedirme de mis redes sociales, pero fue la mejor decisión que tomé", dijo Finn.
Comentó que las redes sociales además de distraerla al momento de hacer ejercicio, la llenaban de mensajes subliminales para que comprara comida.
Asimismo, dijo también cambió su dieta y estilo de vida; sin embargo, resaltó que esto no funcionó sino hasta que cerró sus cuentas en redes sociales. Ahora que Brenda Finn logró bajar 36 kilos, señaló que volvió a abrir su cuenta en la red social Instagram para presumir los resultados de sus esfuerzo.