Para muchos pareciera estar caminando en Japón, sin embargo, se trata de una ciudad en Tamaulipas, la cual tiene el honor de tener al Palo de Rosa, árbol que embellece las calles por su particular flor y su parecido con los cerezos orientales.
Estos ejemplares son propios del sur de México, llenando con su vivo color no solo secciones de México, sino también a Venezuela y Ecuador y algunos otros países sudamericanos.
De acuerdo con el Jardín Etnobotánico del Centro INAH Morelos, el Palo de Rosa (Tabebuia rosea) es un árbol caducifolio, es decir, que pierde sus hojas cada año, pudiendo llegar a medir hasta 25 metros de altura, con un diámetro de poco más de un metro.
Si bien, donde más se les puede ver es en estados desde Nayarit, hasta Chiapas, solo en una ciudad de Tamaulipas se pueden disfrutar enormemente, sobre todo por la temporada de floración, en plena primavera.
Ciudad del Palo de Rosa
Se trata de Tampico, donde los turistas y locales son sorprendidos cada año con grandes racimos de flores rosas, pues de hecho, este árbol tiene muy pocas hojas verdes, destacando este hermoso color.
Su función en la naturaleza va más allá de solo embellecer las calles, pues es una excelente atracción para los insectos y animales polinizadores, como colibríes, abejas y abejorros, quienes se deleitan con su néctar y polen, ayudando a justamente llevar a cabo esta importante actividad en el ecosistema.
Se le conoce también por poseer una excelente madera para la construcción de muebles y objetos de este material, además de su uso medicinal con la corteza y las hojas, mismas que tienen efectos antivirales, molusquicidas y antibióticos ligeros.
Si quieres ir a sorprenderte con el Palo de Rosa, las fechas donde podrás apreciarlo en todo su esplendor son desde marzo y hasta junio, momento en el que florecen, mostrando todo su esplendor a todos los visitantes de la región.