Francisco Javier García Cabeza de Vaca, exgobernador de Tamaulipas, logró ser reconocido como accionista del club de golf donde adquirió una casa en el año 2013, pero la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) revirtió el fallo de un juzgado que ordenó que al exmandatario y a sus familiares se les pagara una indemnización por daño moral por el tiempo en que dieron uso de las instalaciones en el fraccionamiento.
Cabeza de Vaca adquirió la casa en el Club de Golf Cañada de Santa Fe, por la que pagó 14 millones 300 mil pesos; después el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto Castillo dio a conocer que se investigaba si el origen del dinero estaba ligado a negocios del Cártel de Sinaloa.
Se le solicitó al exgobernador que demostrara el origen del dinero con el que adquirió el inmueble, y se le negó ser reconocido como accionista del club, impidiéndole usar las instalaciones comunes, incluyendo el campo de golf.
Ante esto, Cabeza de Vaca emprendió juicios y en octubre del 2019 el Quinto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito falló a su favor, ordenando que se cumpliera la sentencia y se le pagara indemnización por daño moral a él y a su familia.
El club de golf recurrió a la Suprema Corte de la Justicia de la Nación y el ministro Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, determinó que no hay pruebas de daño moral y que la indemnización no procedía.