La música de cualquier género ha movido las fibras más sensibles del ser humano y algunas muestras de este tipo de arte han quedado para la posteridad grabadas en la mente de las personas.
Estas canciones son icónicas en alguna medida y muchas de ellas que seguimos cantando a toda voz tenían mensajes sumamente profundos pero en ese momento no lo sabíamos.
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En los noventas fue el momento en el que se comenzaba a viralizar la música a niveles mayores gracias a la televisión, los discos compactos y la música en formatos digitales.
Y así es como muchas producciones de artistas mujeres eran cantadas y coreadas bastante, pero tal vez no comprendíamos la profundidad de las palabras que ahí estaban plasmadas.
Estas son algunas canciones con mensajes feministas con las que podrías conmemorar este próximo 8 de marzo:
Yo no soy esa mujer de Paulina Rubio
“Yo no soy esa mujer, esa niña perdida que te firma un papel y te entrega su vida. No me convertiré, en el eco de tu voz en un rincón”.
En esta estrofa se muestra una clara postura modernista, alejada de los estatutos patriarcales en los que la mujer debía ser una extensión de su esposo.
Podía y debía seguir siendo un ser individual y no solamente alguien que debía casarse, firmando un papel, para cumplir con su vida.
Doctor Psiquiatra de Gloria Trevi
"Ya no me mire más las piernas, no, no, no, no estoy loca, solo estoy desesperada".
Acá la controvertida artista Gloria Trevi plasma su pensamiento en el que no debía quedarse con una acción habitual de permitir que el género masculino la vuelva un objeto.
Además, plantea una sentencia en la que dice que haga lo qué haga, no está loca, sino desesperada tal vez por la falta de oportunidades o de atenciones pertinentes para tratarla.
A quién le importa de Alaska
“No soy de nadie, no tengo dueño ¿A quién le importa lo que yo haga? ¿A quién le importa lo que yo diga? Yo soy así, y así seguiré, ¡nunca cambiaré!”
Este himno de enorme categoría es una simple y sencilla declaración de la voluntad de una mujer individual, fuerte y decidida que no se dejará someter por un hombre. Trata también de ratificar su naturaleza indefectiblemente individual y portentosa.