Este domingo 10 de diciembre, Consuelo Loera Pérez, madre de Joaquín "El Chapo" Guzmán, exlíder del Cártel de Sinaloa, falleció a la edad de 94 años en una clínica privada de la capital del estado, según informes de medios locales.
Consuelo Loera era tan famosa que tuvo su propio corrido, interpretado por la Banda 'Culiacancito', originaria de Sinaloa. Esta agrupación musical es famosa por componer canciones de música regional relacionada con personajes de la esfera de narcotráfico en México.
El corrido de la mamá del Chapo
Esta es la letra de la canción que inmortalizó a la progenitora del capo sinaloense:
El cielo estaba en tinieblas, la lluvia duro 3 días,
Y una mujer en la sierra, con su dolor se abatía,
Y así bajo entre barrancos, sin mirar la luz de día,
En contra de aquel diluvio, la mujer ajusto el paso,
Buscando una curandera, cerca de Badiraguato,
Creyendo que con un golpe, iba a perder su embarazo,
Será mejor que aguantes, le dijo la curandera,
Esta criatura es muy grande y mucha gente lo espera,
Pa'l pueblo y pa mucha gente, se acabara la pobreza ,
Será tan reconocido, por los primeros lugares,
Mas fama que los artistas, deseado como un diamante,
Tendrá también sus problemas, y siempre saldrá adelante,
Ella aguanto los fregasos, y el niño creció en el campo,
Llegando su adolescencia, dominaba ya el trabajo,
Los golpes en su carrera, ella aprendió irlos brincando,
Humilde como ninguno, amigos como el no existen,
Muy bueno pa los negocios y una hembra lo pone triste
Sabe marcarle el terreno a la parranda y a las bisnes,
Lo tiene estados unidos pero nunca lo tendrá,
En México fue aprendido, le dieron su libertad,
Por que le tuvieron miedo, a ese "Chapito" Guzmán.
De acuerdo con reportes preliminares, el deceso ocurrió a las 2:30 de la tarde y se atribuye a varios padecimientos relacionados con su longevidad. Consuelo Loera Pérez llevaba al menos 15 días internada en la mencionada clínica, según información de fuentes confiables.
La vida de doña Consuelo transcurrió entre la sierra de Badiraguato, especialmente en La Tuna, comunidad donde tenía su residencia, y en Culiacán, siempre cercana a sus hijas mayores y nietos.
Consuelo Loera Pérez, esposa de don Emilio Guzmán Bustillos, dejó un legado de varios hijos, entre ellos Joaquín Archivaldo, Arturo (finado), Miguel Ángel, Aureliano, Armida y Bernarda. Estas últimas dos se encargaban del cuidado de su madre.
A lo largo de su vida, Doña Consuelo mantuvo una imagen contradictoria al profesar la religión cristiana y vivir de manera piadosa, al mismo tiempo que defendía fervientemente a su hijo el "Chapo" Guzmán, reconocido como uno de los criminales más peligrosos y buscados del mundo.
Hasta el último día de su vida, Consuelo Loera Pérez anheló reunirse con Joaquín Archivaldo, marcando así el cierre de una vida llena de polémicas y contrastes.