Este día se cumple un aniversario más del nacimiento de uno de los guitarristas más virtuosos que ha visto la humanidad. Lamentablemente, Eddie Van Halen falleció a los 65 años, en 2020, dejando como última voluntad una acción inesperada con sus cenizas.
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Fue a principios del mes de octubre del 2020 cuando el mundo conoció la trágica noticia del músico neerlandés, quien llevaba padeciendo varios años un cáncer de garganta el cual presuntamente acabo con su vida. Contrario a lo que fans creyeron en un principio, Eddie Van Halen no había muerto por causa de esta enfermedad, sino más bien por el deterioro de este en su cuerpo.
Según el certificado de defunción al que tuvo acceso en su momento el portal de noticias TMZ, el fundador de la banda Van Halen sufrió un accidente cerebrovascular (o derrame cerebral) el pasado 6 de octubre después de meses de otras dolencias y un estado de salud delicado a nivel general.
Sumamente enfermo
A su vez, también encontraron otras patologías como neumonía, el síndrome mielodisplásico de la médula ósea, un ritmo cardíaco poco estable y la afectación de su cáncer al cerebro y otros órganos; Eddie Van Halen estaba sumamente enfermo.
Poco tiempo después, 22 días para ser exactos, el cuerpo del artista fue incinerado y entregado a su hijo Wolfgang Van Halen. Consciente del dolor sufrido también en sus seguidores, el heredero de la leyenda del Rock comunicó un sensible mensaje para tratar de minimizar la pena en sus redes sociales.
"No puedo creer que tenga que escribir esto, pero mi padre, Edward Lodewijk Van Halen, ha perdido su larga y ardua batalla contra el cáncer esta mañana", aseguró Wolfgang sobre su famoso progenitor, del que aseguró que había sido "el mejor padre que se puede tener" y que "cada momento suyo en el escenario y fuera de él fue un regalo".
El intérprete de canciones como Jump o You really got me, dejó en claro qué hacer con sus restos, pidiendo a su familia reunirse para entregar las cenizas a la naturaleza, en el Pacífico desde la costa de Malibú, California, donde vivió sus últimos días apreciando los atardeceres.
Solo de guitarra
Eddie será recordado por ser uno de los mejores guitarristas, sin embargo, también por un hecho insólito, al tener en su repertorio el segundo mejor solo de guitarra de todos los tiempos, de acuerdo con Guitar World.
Fue en "Eruption", canción instrumental perteneciente al álbum debut Van Halen lanzado en 1978 donde podemos apreciar una magistral clase de Van Halen, el cual lleva la guitarra hasta sus límites durante 13 minutos.