El éxito deportivo es producto de la perseverancia y dedicación para alcanzar las metas. Gali Peña, jugadora de softbol femenil de Laredo, Texas, recientemente recibió una beca para competir y estudiar en la Universidad de Texas A&M Kingsville.
La deportista finalizó su etapa de colegio en la vecina ciudad representando al United North School Longhornes en las competencias escolares, además de ser parte de equipos de gran nivel en las Ligas laredenses y la región. Gali se desempeña en la receptoría, una posición que exige fortaleza física y control emocional a la hora de colocarse detrás del plato durante el juego.
LE LLEGA LA OPORTUNIDAD
Su trabajo en la receptoría llamó poderosamente la atención de instituciones de Estados Unidos, entre ellas la Universidad de Kansas, que le ofreció una beca deportiva.
Fue la propuesta de la Universidad de Texas A&M Kingsville la que logró cumplir con todas las expectativas para Gali, quien no dudó en firmar con la institución a la que estará Ligada por varios años.
De acuerdo con los representantes de la institución texana, hay mucho interés para que la fronteriza juegue la receptoría, una posición clave en cualquier equipo.
Gali, ahora integrante del equipo Javelinas, se estará presentando con su nueva universidad, el sábado. Mientras eso sucede, ella codirige los entrenamientos del equipo Elite 13 que comanda su padre Jorge Peña, un expelotero profesional que jugó con Tigres del México, hace ya algunos años.
A Gali le encanta entrenar a las cátchers y cada vez que tiene oportunidad, comenta que en Laredo, Texas, existe mucho talento, sólo hay que darles la oportunidad de mostrarse.
“Se le presentó una mejor oportunidad y la aceptó, para eso se prepara hasta el día de hoy, porque a ella le gusta mucho competir”, expresó Brenda Peña, madre de Gali.
Con información del profesor Silvino Cuevas Reyes