Mucho se ha dicho sobre la importancia de tener buenos hábitos de sueño que incluyan dormir suficiente, propiciar que la habitación para descansar tenga las mejores condiciones, no usar el celular en la cama… etc. Sin embargo, algo que probablemente no imaginabas es que esto influye aún más en tu salud si tienes alguna enfermedad crónica.
Un nuevo estudio realizado a 16 mil personas de entre 20 y 74 años, cuya salud fue monitoreada por un periodo de dos décadas, encontró que, aquellas personas que tienen diabetes tipo 2 o alguna enfermedad cardiaca y duermen menos de 6 horas, aumentan las probabilidades de padecer cáncer o morir prematuramente.
¿Por qué dormir podría salvarme de una muerte prematura?
Una de las principales razones por las que el sueño es importante para la salud de cada parte de nuestro cuerpo es el hecho de que mientras dormimos, pasamos por una especie de rejuvenecimiento que consiste en, a través de la liberación de ciertas hormonas, reparar células y tejidos de todos nuestros sistemas.
Para entrar al proceso en que el cuerpo se recupera del desgaste, primero debemos estar en sueño profundo, lo que sólo sucede después de un ciclo completo del sueño… así que si duermes poco o de forma intermitente, probablemente no llegarás a él o lo harás por poco tiempo.
La falta de sueño perjudica tus salud si tienes una enfermedad
La investigación concluyó que aquellas personas que sufren hipertensión o diabetes tipo 2 y duermen menos de 6 horas al día, tienen el doble de probabilidades de morir por una afección cardiaca un algún derrame; este riesgo “desaparece” si las personas duermen entre 6 y ocho horas, explicó Julio Fernández-Mendoza, el autor principal del estudio.
Otro hallazgo relevante y preocupante es que no dormir suficiente también se relacionó con el cáncer, no porque la falta de sueño lo cause, sino porque las cardiopatías son un factor de riesgo para desarrollarlo y el descanso insuficiente agrava los problemas del corazón.
“La gente que padece cardiopatías es más propensa a tener problemas inmunes y desarrollar cáncer. Y hay un estrecho vínculo entre el sueño y el sistema inmune”.
Julio Fernández-Mendoza