Alumnos de sexto grado de la escuela primaria Francisco Hernández concluyeron ayer sus estudios de una manera emotiva, pues dejan una etapa importante de su formación académica para seguir adentrándose al último escalón de la educación básica, la secundaria.
Los estudiantes tuvieron como padrino de la generación al delegado de Programas para el Bienestar Región 4, Heriberto Cantú Deándar, a quienes los padres de familia otorgaron dicha distinción como agradecimiento al apoyo que se ha brindado a la institución a través del programa La Escuela es Nuestra.
“Nos hizo el honor de venir como padrino de generación, ya que la comunidad educativa, tanto maestros, alumnos y padres de familia, tuvieron a bien tener la distinción con él, al ser una persona que ha estado en toda la disposición de apoyar a la escuela”, destacó el director Francisco Hernández.
Durante la ceremonia, además del diploma que recibieron los 61 alumnos, a los tres estudiantes más destacados del ciclo escolar se les entregó un reconocimiento especial.