Cada 12 de septiembre se celebra el Día Internacional de Acción contra la Migraña, que es una de las enfermedades más incapacitantes hoy en día, de acuerdo a la Organización Mundial de la salud (OMS).
La migraña se caracteriza por fuertes dolores de cabeza y cefaleas que van relacionados a distintos factores, además de que puede ser hereditaria.
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Sus síntomas son principalmente fuertes dolores pulsantes en uno o los dos lados de la cabeza, acompañados de nauseas y vómitos. Se presenta con mayor frecuencia en las mujeres que en los hombres.
Los primeros síntomas de una migraña se presentan generalmente en la niñez, sin embargo los dolores suelen presentarse durante toda la vida. Según estudios la enfermedad se presenta más entre los 25 y 45 años, pero puede extenderse hasta más de los 65.
De acuerdo al censo de 2005, en México había aproximadamente 20 millones de casos confirmados de pacientes que sufren la enfermedad.
Para la migraña no hay cura, pero se puede controlar con medicamento prescritos por un médico, como analgésicos y betabloqueantes para aliviar el dolor de cabeza y disminuir la intensidad de la migraña.
Los períodos de duración en el paciente van de unas cuantas horas pero puede permanecer por días, de ahí que los pacientes no puedan ejercer alguna actividad por el intenso dolor.
El uso frecuente de los fármacos las puede hacer intolerantes a estos medicamentos, debido a que van teniendo resistencia.
Otros métodos que se han utilizado para aliviar momentáneamente la migraña son ejercitarse mediante el yoga pues sus movimientos fomentan la respiración profunda, la relajación y la meditación.
¿A qué se deben las migrañas?
Estas se deben a que las células nerviosas del cerebro generan actividad eléctrica intensa, que afecta algunas funciones como la vista, el equilibrio, la coordinación muscular, la sensibilidad y el lenguaje. El dolor de cabeza se produce debido al estímulo del quinto par craneal (nervio trigémino), liberando sustancias que ocasionan inflamación en los vasos sanguíneos cerebrales y las capas de tejido que cubren el cerebro (meninges).
Se ha comprobado que las causas que producen una migraña son las siguientes:
- Cambios en los niveles hormonales, debido al uso de píldoras anticonceptivas o al ciclo menstrual en las mujeres.
- Estrés y ansiedad.
- Modificación de los patrones del sueño.
- Ingesta de alcohol.
- Sensibilidad a ruidos fuertes o luces brillantes.
- No ingerir alguna de las comidas.
- Sensibilidad a olores fuertes.
- Consumo de tabaco.
- Consumo de ciertos alimentos: productos lácteos, chocolate, productos que contengan glutamato monosódico (GMS), frutas cítricas, alimentos procesados, maní, nueces.
El dolor en una persona que padece migrañas puede ser tan intenso en su fase aguda que a veces no puede ni subir las escaleras, pues con el esfuerzo el malestar se incrementa. Además, suele acompañarse de molestias por la luz y el ruido, y en ocasiones de náusea y vómito.
Entre los factores que pueden producir migrañas se pueden señalar los medioambientales como el estrés, ciertos alimentos y/o bebidas como el queso, chocolate, comida china, alcohol, café y vino tinto, entre otros.
¿Qué tratamiento se puede dar?
Diversos neurólogos coinciden en que la migraña no tiene cura, pero existen tratamientos para mantenerlo controlado y mejorar la calidad de vida de quien la padece. Al menor indicio del dolor de cabeza se recomienda administrar analgésicos de acción rápida, pero si se llega a presentar durante tres o más veces al mes, lo indicado son los medicamentos “profilácticos” para disminuir la intensidad y periodicidad.