En Texas, la seguridad de los estudiantes al abordar o descender del transporte escolar es una prioridad.
Por ello, las autoridades han implementado una estricta sanción para aquellos conductores que no respeten las normas de seguridad en las cercanías de los autobuses escolares.
A partir de ahora, los automovilistas que no detengan su vehículo cuando un autobús escolar esté subiendo o bajando estudiantes, enfrentarán una multa de hasta 1,000 dólares.
Te podría interesar
¿Cuáles son las normas de seguridad?
Según las leyes de tráfico de Texas, cuando un autobús escolar detiene su marcha y activa sus luces rojas intermitentes, todos los vehículos que se aproximen desde cualquier dirección deben detenerse.
Esto se aplica tanto en zonas urbanas como rurales, y la sanción es la misma independientemente de la ubicación.
Los conductores deben esperar hasta que el autobús retome su recorrido o desactive las luces rojas antes de continuar.
¿Por qué es tan importante?
Estas medidas están diseñadas para proteger a los estudiantes, quienes a menudo cruzan la calle para abordar o bajar del autobús.
El hecho de no respetar esta regla puede poner en grave riesgo la vida de los niños.
Además de la multa de 1,000 dólares, los infractores podrían enfrentar otras penalizaciones, como la suspensión de la licencia de conducir o la acumulación de puntos en su historial de manejo.
En resumen, si conduces en Texas, asegúrate de respetar las señales de los autobuses escolares.